The Assumption of the Blessed Virgin Mary

August 15

The Assumption of the Blessed Virgin Mary

Reflexión por Olaf Valderrábano, en lugar del Padre Jack Shrum

Aprovecho la bendición de compartir con todos ustedes esta reflexión. Al escribir, estamos en medio de nuestra Escuela Bíblica de Verano, con casi 200 niños y jóvenes y adultos voluntarios. Hacer realidad VBS como una semana de aprendizaje, de compartir la fe, y de gozo lleva mucho trabajo. Sin embargo, es una obra que nos da más gozo aún.

Nos llenamos de gozo especialmente cuando una abuela comparte con nosotros que su nieto de Kinder llego a casa el Lunes pasado, abrió la Biblia y empezó a compartir las historias que aprendió en VBS, sobre todo que "incluso cuando te hacen menos, ¡Jesús te ama!"

Durante VBS aprendimos cinco puntos cruciales para nuestra vida:

• Aún cuando te hacen menos, ¡Jesús te ama!
• Aunque seas diferente, ¡Jesús te ama!
• Incluso cuando no entiendes, ¡Jesús te ama! [Nota: ¡este es mi favorito!]
• Aún cuando cometes errores, ¡Jesús te ama!
• Incluso cuando usted tiene miedo, ¡Jesús te ama!

¡Sí, Jesús te ama! Tal vez ya lo sabemos. Lo que hace VBS un momento especial para experimentar esa Verdad es que tenemos la oportunidad de ver cómo los niños ya conocen la Verdad, cómo la sienten, y cómo la comparten de maneras inesperadas para nosotros los adultos.

Observando cómo estos niños crecen en el conocimiento y el amor de Dios durante esta semana, me pregunto si es así como María, de niña, experimentó la presencia de Dios. Ella tenía una familia, abuelos, padres, primos, que trataron de vivir cerca de Dios y de sus prácticas religiosas.

Me pregunto qué profunda ha de ser la fe de los padres y madres que rápidamente dejan a sus hijos en nuestra VBS, ya que todavía tienen que llegar al trabajo a tiempo, porque saben qué es importante que sus hijos experimenten la cercanía de Dios.

Podríamos pensar que estamos tan lejos de la Virgen, Nuestra Madre María, y ni siquiera nos deberíamos atrever a compararnos con ella. Después de todo, ella estaba llena de La Gracia. Sin embargo, también nosotros podemos estar llenos de la gracia, compartiendo los Sacramentos, en la Eucaristía y estando atentos a la fe profunda, casi natural, de nuestros hijos.

María, Madre Nuestra, ¡Gracias por guiarnos en el camino al cielo!